La murga Diablos Locos, dentro de las actividades que se engloban en la celebración de sus cincuenta años en el Carnaval de Santa Cruz, han organizado un partido de fútbol sala solidario. La intención es combinar deporte y solidaridad, haciendo una recogida de juguetes para niños de familias sin recursos.
El partido se celebrará el domingo 29 de diciembre a las 18:00 horas en el Pabellón Municipal de Deportes “Quico Cabrera”, en Santa Cruz. Un pabellón situado a pocos metros del Estadio Heliodoro Rodríguez López en el que se enfrentarán directores de murgas con políticos. El partido lo podrán presenciar todos aquellos que acudan hasta allí con un juguete, que valdrá como ticket de entrada. La murga quiere donar esos juguetes a diversas ONG que trabajan en Santa Cruz, para que ningún niño se quede sin juguete.

El partido promete ser entretenido y divertido. Dentro del equipo carnavalero se confirman interesantes fichajes. Directores y directoras de murgas, que dejarán sus preocupaciones por las letras y las voces, para pensar sólo en ganar al contrario. Entre otros ya se cuenta con la directora de Diabólicas y los directores de Bambones, Zeta Zetas y Ni Pico. Por supuesto, no faltará Maxi Carvajal, que dicen que ya calienta por las bandas.
El equipo de los políticos trae muchas sorpresas. Los que hasta allí se desplacen con su juguete y puedan disfrutar del partido, verán un equipo formado por la alcaldesa de Santa Cruz, Patricia Hernández, la teniente de alcaldesa Matilde Zambudio, el concejal de fiestas Andrés Martín, el anterior presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y miembros del anterior equipo de gobierno de la Ciudad entre los que se encuentran José Manuel Bermúdez, Gladis de León y Dámaso Arteaga.

Unir deporte, carnaval y solidaridad es una maestría de la que Diablos Locos sabe dar buena muestra. Una murga solidaria donde las haya.
En Factoría de Carnaval nos quitamos el sombrero. Diablos Locos, con este partido, meterán un gol a la pobreza y tendrán como resultado el mejor galardón, que no es otro que la sonrisa de todos esos niños y niñas a los que llegará un juguete.
Realmente son Diablos con mucho corazón.
Redacción Factoría de Carnaval – Rubén Mesa