Hablamos con Iván Moreno, conocido artísticamente como Cacú. Uno de los músicos más destacados en el mundo del carnaval tinerfeño.
¿Cómo surgió su pasión por la música?
Pues yo vengo de familia carnavalera. Mis padres fueron componentes de Gavilanes, luego fundaron la comparsa Los Tabajaras y al año siguiente recalaron en Los Cariocas. Ya ahí comienza mi vena por la percusión y con siete años participaba en el Concurso de Ritmo y Armonía. Los tambores me llevan a estudiar y a adentrarme en la percusión de manera más profesional. Con catorce años debuto en mi primera orquesta y, hasta hoy, carnaval y profesión van de la mano siempre conmigo.
¿Se fusionaron carnaval y música?
Como te comentaba, desde los catorce años empecé a tocar profesionalmente, pues iba compaginando los grupos del carnaval con mis tareas profesionales. Más adelante el carnaval se profesionalizó un poco, y hasta antes de la pandemia era otra vía más de ganancias en este oficio.
¿Cómo es la vida de un músico en carnaval?
Cuando te dedicas a esto, profesionalmente, buscas estar en paz contigo y con todos los que requieren tus servicios ya que nunca se sabe dónde vas a tocar mañana. He podido participar en murgas como Singuangos, Triqui Traques, Diablos Locos, Los Que Son Son siendo fundador y en Jocikudos. En agrupaciones musicales como Chaxiraxi, Caña Dulce, Teiderife, Luz de Luna Y Salsarengue. En comparsas como Cariocas, Tabajaras, Bahía Dorada y Rio Orinoco. En todos ellos he puesto mi profesionalidad a disposición del grupo, siempre siendo humilde y siempre dejando las puertas abiertas allí donde voy, porque no se sabe si en algún momento se regresará.
¿Cómo ha sido estar con grandes voces y grandes orquestas?
Mi trayectoria como director de mi propia orquesta, en más de diecisiete años de experiencia, que hemos sido la orquesta con la que se han presentado en Canarias artistas como José Alberto el canario, Charlie Aponte, Cano Estremera, Jerry Rivera, Adalberto Santiago, Maelo Ruiz, Luigi Texidor, Tito Rojas, Chamaco Rivera, Marlon Fernández, Saned, NG2, DLG new generation, Jimmy D’León, Aymee Nuviola, Roberto Blades, Alex D’Castro y muchos más.
Hemos podido compartir cartel y escenario como teloneros de Oscar D’León, Gran Combo de Puerto Rico, Adolescentes, Salserín, Sonora Carruseles, Tito Nieves, Cheo Feliciano o Andy Montañez.
He sido músico de refuerzo para otros artistas del género del merengue y partícipe en diferentes actuaciones, sobre todo en carnavales, con Edwin Rivera, Tony Tun Tun, Many Manuel, Jossie Esteban y Sin Fronteras. También he participado en las orquestas canarias Caracas Latin Brothers, fundador de Sarao Latino, Malibú Band, Banda Sólida, Sabrosa, Tropin o Maracaibo, entre otras.
¿Cómo surge la idea de crear La Esquina del Cacú, en redes sociales, desde el inicio de la pandemia hasta la celebración del carnaval virtual?
Pues la idea de La Esquina del Cacú surgió el mismo día que nos quedábamos confinados, el 13 de marzo de2020. Yo acababa de llegar de Cádiz y perdí el vuelo de vuelta, y desde el aeropuerto de Sevilla hice un directo para entretenerme y hablar con la gente. Ese fue el germen. Al llegar aquí, ese mismo fin de semana nos confinaron y la idea era estar dos horas diarias, mientras estuviésemos confinados y así se hizo, durante dos meses y medio, todos los días desde las 20:00 hasta las 22:00 horas, aunque había algunos días que terminaba a las 22:30 o a las 23:00 horas. Hicimos de todo: chistes, parapsicología, astronomía, historia guanche, política, música, fases Covid y cómo no, carnaval.
En las fechas del carnaval 2021 se me ocurrió recordar el carnaval con especiales “La Esquina en Carnaval”. Realizamos especiales de de todo tipo: murgas, comparsas, agrupaciones musicales, rondallas, canción de la risa, medios de comunicación, carnaval de Cádiz, orquestas (baila la calle). Aún, de vez en cuando, le doy a transmitir y realizamos en directo programas, pero más en plan hobby.
¿Cómo está siendo este tiempo de pandemia para los músicos?
Para los músicos ha sido paro y casi exterminación para el sector. Son muy pocos los que trabajan y por ahora no hay visos de que la cuestión cambie. Por parte de las instituciones no hay ayudas y no hay actividades como para recuperar el sector. Un sector muy dañado y que costará que siga a delante. No nos queda más que pelear y reivindicar nuestro derecho a trabajar, como cualquier otro sector.
¿Qué ha significado para Iván Cacú un año sin carnaval?
Este año sin carnaval, para mí ha sido una pérdida de identidad notable. Un año sin poder hacer lo que más le gusta al chicharrero, desde septiembre hasta febrero y ya en marzo pensando en el siguiente. Verdaderamente no sé si volveremos a los carnavales de antes y tampoco sé si será en 2022.
¿Cuál es su opinión sobre el carnaval virtual?
El carnaval virtual es una opción para lo que hay actualmente. Mi punto de vista varía para según qué actos. La gala me pareció bonita, dinámica, emotiva y quizás sea un nuevo comienzo de espectáculos carnavaleros, pero me sobró gente y eché de menos a mucha otra gente. Los reportajes, realizados todos con todo el cariño del mundo, pero en ocasiones mezclando para abarcar tanto, que no se le dio la repercusión que se merecen, como la que sí recibieron las murgas y comparsas.
La cantera es nuestra fuente de abastecimiento, deberían haberle dado mucho más énfasis y creo que de murgas infantiles se podía haber realizado un especial solo para ellas. Lo mismo con las agrupaciones y las rondallas que se merecían un reportaje más específico de cada modalidad y no mezclarlo todo. Seguro que si siguen realizando este tipo de cosas, mejorarán estos detalles.
Redacción Factoría de Carnaval – Rubén Mesa Mengíbar